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sábado, 12 de diciembre de 2015

4 detalles maravillosos (y algunas meteduras de pata) de 'El Retorno del Jedi'


Terminamos el oportuno repaso a la trilogía clásica de Star Wars con la entrega más floja de las tres. Con cierto margen, además. Entendedme, me gusta, tiene muy buenos momentos y es un dignísimo final, pero dejando a un lado el cariño que se gana por pertenecer a la saga a la que pertenece, como película la veo poco inspirada en varios aspectos y un par de escalones por debajo de lo que podría haber sido. Pero no solo comentaré lo malo, porque como decía, hay buen material aquí que merece reconocimiento.


-Jabba el Hutt

'El Retorno del Jedi' empieza con un largo segmento completamente desconectado del resto del film a nivel argumental, pero que es 100% necesario. Hay que resolver el mayor cliffhanger de la anterior entrega: hay que salvar a Han. Así, conocemos por fin al muy mencionado y presumiblemente aterrador Jabba el Hutt. Y es PERFECTO. Es justo como tiene que ser, una babosa gigante y asquerosa, un tirano cruel, un pervertido, un... ay, es que es odioso. Y por eso es tan divertido y memorable. Ponerle a C-3PO de traductor es la guinda. Además, la marioneta es verdaderamente asombrosa. No es la única de este enorme prólogo. Todo está poblado de muñecos y gente disfrazada, y si a eso sumamos a un Luke mucho más maduro con una flamante espada verde, a Han ciego, a Leia en bikini, al Sarlacc, al Rancor, y la aventura constante que domina esta parte, compensa que el plan de nuestros héroes sea bastante chorra y que, como decía, la desconexión con el resto de la trama sea total.

-El Emperador

Aquí pasa lo mismo que con Jabba. En la anterior entrega tuvimos un breve vistazo y comprendimos que no solo era el Emperador, sino el maestro de Vader. Tela. Expectación máxima. Y de nuevo, el personaje está a la altura. Es muy inteligente que en la entrega en la que Vader saca su lado humano y trágico, tengamos a un villano total como contraste, un adversario definitivo para Luke. Este señor es EL MAL. Su aspecto, su forma de hablar y de moverse, lo que dice, su risa, el hecho de que de pronto lance rayos (cosa que no se había visto hacer a ningún personaje hasta entonces). Maravilloso todo. Es, básicamente, el Yoda oscuro. Ian McDiarmid lo borda y se lo pasa pipa, tanto que volvió para las precuelas. Menos mal.

-El conflicto entre Luke y Vader
Esta tercera entrega tiene muy claro que Han, Leia y casi todos los personajes ya tienen muy poco que contar. Que realmente lo único que importa es la relación Luke-Vader, mucho más fascinante de lo que Lucas pudiese imaginar en un principio. Si esta entrega es buena es por esto, la verdad.
Con un par de diálogos muy reveladores, Vader se transforma. Otra vez. De secuaz molón, a villano brillante, a figura trágica. Un ser atrapado por el Emperador que ya no sabe ni cuales son su prioridades. Parece tan cruel como siempre, pero que de más importancia a reencontrarse con su hijo que a los planes del Imperio lo cambia todo. Decía de verdad que quería cargarse a su maestro y gobernar él junto a Luke. Me parece la hostia. Pero ah, no contaba con que Luke le llamase "padre" y le abriese los brazos intentando sacarle del Lado Oscuro. Y tiene un conflicto de la leche. Y lo sentimos. Sin verle la cara, sin saber todo su trasfondo. Con todo lo que está pasando en su interior, en esta peli Vader se confirma como el mejor personaje de Star Wars.
Luke también tiene lo suyo. Tras quedar destrozado en la anterior cinta, se ha recompuesto más sabio. El entrenamiento Jedi es muy místico y simbólico, así que aunque no se nos muestre cómo y porqué se ha vuelto tan poderoso, entendemos que ha madurado, y con eso nos basta. Y a Yoda también. Pero para convertirse del todo en un Jedi debe rechazar por completo al Lado Oscuro derrotando a Vader. Sin embargo él confía en poder vencer rindiéndose y despertando al Anakin que Vader lleva dentro. Dios, esto es potentísimo o qué. Tenemos al Emperador tentando a Luke y a Luke tentando a Vader. Esto no es un duelo al uso. Aquí, Luke y Vader no luchan entre ellos en ningún momento, sino contra sí mismos. La explosión emocional del minuto 3:15, primera vez que se pone música propia a un combate, es de lo mejor de la saga, así como la inmejorable resolución. Qué queréis que os diga, si después de esto Luke es malo en 'El Despertar de la Fuerza' me tocará mucho los huevos. Por pura incoherencia.


-La batalla espacial
Siendo el final, está claro que teníamos que tener una megabatalla sí o sí. Pues toma. Casi la mitad de la peli es el clímax, dividido en tres frentes muy bien conectados. Si la carga emocional está en Luke y Vader, el ESPECTÁCULO está en el espacio, con, fácilmente, los mejores efectos especiales de la trilogía y un John Williams pletórico, cómo no. Una gozada.


LO MALO
Sé que esta película es tan mítica como las otras, y sin duda me gusta, pero lo siento, hay puntos ngatyivos de peso, pues se nota que es la menos inspirada de la trilogía. Si bien tenían muy claro lo que contar con Luke y Vader y como debía ser el primer acto del film, más allá de eso solo tenemos... pues... "batallas y eso". Sin un verdadero peso emocional ni una trama currada. ¿Queréis pruebas?

-OTRA Estrella de la Muerte
Esto es muy simple y evidente. No se les ocurría una nueva gran amenaza así que repitieron lo de la primera. Tal cual. No hay muchas vueltas que darle. Que cada uno decida cuánto le molesta esto, pero ahí está.

-Endor
Lo confieso, todo lo de Endor me aburre soberanamente. Relleno total. Los Ewoks por sí mismos no me molestan, pero no aportan al argumento. Si hay que ceder minutos a una escena en la que C-3PO (el "dios" de la tribu, una chorrada sin precedentes en la saga) les narra las aventuras vividas anteriormente por los protas es que algo va mal. La sensación de "pues nada, aquí, esperando a que empiece la mandanga", incluso en la celebrada escena de las "motos", es abrumadora. La putada es que cuando empieza dicha mandanga no es gran cosa. Han y Leia se quedan parados delante de una puerta la mayor parte del tiempo y la verdadera batalla la protagonizan los Ewoks. Y a parte de quedar cutre e infantil, va contra lo que uno quiere ver en un final de trilogía. Dejad que me cite a mi mismo cuando hablé hace unos días de la última temporada de 'Buffy, Cazavampiros': "...en los grandes finales de sagas o de series de fantasía, exijo cierta dosis de fanservice. Quiero que los protas lo den todo, que estén mejor que nunca, y que haya momentos más grandes que la vida cada dos por tres." No, ver a ositos luchando de forma adorable contra soldados idiotas no es lo que tenía en mente. Porque insisto, Han y Leia no brillan nada. Y no solo durante la batalla, por desgracia. El carisma de la anterior entrega se ha perdido (a Ford y Fisher se les ve desinteresados) y no se les explora más como personajes. Ya hemos visto todo lo que había que ver de ellos. Su relación ya no es divertida ni sentida (más allá del prólogo), y casi ni parecen los mismos, especialmente Han. ¿Desde cuándo es torpe, bobalicón, ligeramente cobarde y se siente amenazado por Luke en lo que respecta al afecto de Leia? El Han de la anterior peli es uno de los mayores héroes del séptimo arte. Este no. Y por último, lo de que Leia sea "la otra Skywalker" es un cierre repentino a una subtrama que prometía mucho más, que en un principio se iba a desarrollar de otra forma, y que al final no aporta nada.
Vale, esto mola
En fin, buena película (a ratos muy buena) con puntos muy positivos que me encantan y que supone un cierre de trilogía claramente digno y lo bastante satisfactorio, pero me siento un poco aliviado al saber que, ahora, este ya no es el verdadero final. Han necesita volver a petarlo.

6 comentarios:

  1. Un imperio destrozado por ositos de peluche... Una verdadera lastima, pues sin ser mala mala, esta demasiado lejos de sus dos memorables hermanas.

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  2. Y pensar que los Ewoks fueron por culpa del presupuesto. Que la idea era usar a los Wookies y al fin ver lo que nos insinuaba Han en la cuarta, Wookies arrancando brazos, saltando de árbol en árbol arrasando al Imperio con su superioridad tanto física como mental (los Wookies son grandes ingenieros) y eso se vio negado porque Lucas no tenía dinero para llevarlo a cabo.
    Y el otro problema es que nos hemos perdido que fuera dirigida por Spielberg (Imaginad la maravilla que nos habría dado Spielberg en sus tiempos de Indiana Jones) y como Lucas (De nuevo) se había enemistado con el sindicato de directores por La Guerra de las Galaxias pues también nos perdimos eso.
    Aquí ya se empezó a notar el problema de Lucas aseveró con las secuelas, es un gran creador, pero un pésimo contador de historias. Te crea el mundo, los personajes, pero no sabe como ir del punto al punto b.
    Y el tema de la hermana de Luke da para un artículo muy interesante, con la idea original de Lucas de que la hermana estuviera congelada por el Emperador y fuera el villano de la tercera.
    Pero aun así tenemos una gran película, la música de Williams para la batalla espacial es de mis favoritas de toda la saga.

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  3. que críticas más cojonudas esta teniendo la nueva peli... Hype al máximo

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    Respuestas
    1. Ya te digo. Parece que Star Wars, lo que debe ser Star Wars, ha vuelto. Yo la veo el viernes prontito así que seguramente el sábado ya tenga lista la crítica.

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    2. Sera que estamos aun estamos desilusionados de que una historia tan buena como la de las pre-cuelas haya salido películas tan mediocres?
      Yo la veo el domingo

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    3. Si hacen un remake de la nueva trilogía (aunque con 16 años a sus espaldas ya no es tan nueva) seré el primero en ir a verlas.

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